viernes, 2 de febrero de 2018

La Prima.Cuando una serie de malos factores se junta.

Por: Manuel Hernández-Samperio.

El trabajo de Vicente Leñero como escritor abarcó diferentes géneros y el cinematográfico no fue la excepción. La cinta más polémica en que participó fue El crimen del padre Amaro, que sería una adaptación del escritor portugués José María Eça de Queirós. El último guión que adaptó fue del mismo escritor y lleva por título La Prima, que es dirigido por Víctor Ugalde y que es el que analizaremos a continuación. 

En la ciudad de Guanajuato habita el matrimonio conformado por Luisa (Natasha Esca) y (Jesús Ochoa), quienes llevan una vida llena de lujos gracias al trabajo de él, sin embargo, las cosas no parecen ir del todo bien gracias a que ella está insatisfecha sexualmente. En un viaje que su esposo decide realizar y que implicará ausentarse por dos meses vuelve a Guanajuato Basilio, un primo lejano con el que en su temprana adolescencia había tenido ciertos acercamientos.  

La reaparición en su vida de Basilio, la presión de sus amigas y el mismo deseo por llevar un vida sexual plena se complementarán para darle la oportunidad de experimentar y embarcarse en una aventura que podría llevarla a problemas que no ha imaginado. 
La historia que nos plantea el guión de Leñero, se asienta en el plano de la comedia para mostrarnos la doble moral que impera en nuestra sociedad, y mientras busca alcanzar otro objetivo toca de pasada algunos otros problemas como la corrupción o las relaciones de trabajadores con sus patrones. 
 

Sin embargo, la manera en que está planteada la historia termina por acabar con ella. Nos encontramos con una mezcla en los diálogos que dan la impresión de ser, muchos de ellos, de hace cincuenta años, mientras que otros tantos se antojan actuales. Pero los problemas no paran ahí, la historia misma que nos plantea el guión termina por volverse predecible gracias a la cantidad infinita de clichés de los que se echa mano, de diálogos que incluso se pueden adivinar gracias a su uso constante en historias cotidianas que pueden verse en la televisión. 

De hecho, cuando se la ve como un todo y gracias al uso de la cámara o los planos y la velocidad en los cortes derivada de la edición, la cinta se antoja más como un producto de televisión que meramente cinematográfico, a esto podemos añadirle que en el plano actoral el trabajo de los interpretes termina por ser totalmente disparejo. Mientras por un lado se tiene gente muy experimentada como Angélica Aragón, María Rojo o Jesús Ochoa, por otro lado se tiene el cuasi debut de Natasha Esca o a Mark Tacher. Esto viene a dar como resultado que muchas de las actuaciones se vuelvan exageradas unas, acartonadas otras 

Este punto, junto con el de algunas situaciones por sí mismas le quitan verosimilitud a las diferentes escenas que se plantean. 

Además de lo anterior, a lo largo de la historia se dan diferentes saltos tanto en los lugares como en el tiempo que terminan por caer en diferentes errores de continuidad. Hay un empleo indiscriminado de sonidos que buscan acompañar e ilustrar las acciones.  


La Prima, el último trabajo de Vicente Leñero, dirigido por Víctor Ugalde termina por convertirse en una cinta que intenta plantear temáticas polémicas como la infidelidad femenina y doble moral que impera en la manera en que le exigen ciertos comportamientos al sexo femenino. La cinta cuenta con un elenco que muchas películas con bajo presupuesto envidiarían, sin embargo, el exceso de personajes, los clichés de los que echa mano y la manera en que está tratado el montaje terminan por hacerla caer. Son más los momentos de comedia involuntarios que los que presenta el guión. Sin duda, un desastre. 

La Prima, Víctor Ugalde, México, 2017, 97  mins Con: Jesús Ochoa, Natasha Esca, Mark Tacher, et. al.

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