miércoles, 12 de abril de 2017

La chica desconocida. Voltear a ver a los "sin nombre"


Por: Manuel Hernández-Samperio.

El cine de los hermanos Dardene se ha caracterizado por retomar temáticas en donde lo que se pone a prueba es la sociedad en la que están inmersos y los valores que la rigen. Viendo su cine uno puede darse cuenta de que cada vez las sociedades, quizá por fenómenos como la globalización, comparten reglas, valores y formas de pensar. A nivel mundial, uno delos temas que ha estado en boga en los últimos años es el de la migración y en La chica desconocida, la más reciente cinta de esta pareja de hermanos, una migrante es el pretexto para que se revelen diferentes aristas de su sociedad.

Jenny Davin (Adele Haenel) doctora de profesión pasa su vida entre su consultorio y las casa de sus pacientes. Una noche al terminar su jornada laboral en el consultorio y tras cerrar una mujer toca insistentemente a la puerta, pero decide no abrir la puerta. Al día siguiente es encontrado el cadáver de la mujer ala que no atendió, sin embargo, su condición de migrante la deja como una total desconocida, lo que impide su identificación para avisar a su familia. 

Al darse cuenta de la situación y con algunos cargos de conciencia acuestas, la doctora decide darse a la tarea de investigar el nombre de la ignota, sin saber que en su misión tendrá que enfrentar y burlar diferentes obstáculos que van desde la policía quien ya la ha interrogado, hasta algún tratante de blancas. 

La más reciente producción de Luc y Jean Pierre Dardene continúa, como lo mencionado al inicio: cuestionar las diferentes problemáticas que enfrenta su sociedad, en este caso con la proliferación de los migrantes cuya aceptación (y/o rechazo) ha sido muy polémico. Tienen en su carrera dos películas con grandes similitudes con ésta: El silencio de Lorna (2008) y Dos días, una noche (2014), la primera en donde también hablaban de una migrante, en este caso como protagonista, en la segunda, porque reflejaban la travesía de una mujer en busca de un objetivo concreto. El caso de La chica desconocida es precisamente eso: la travesía de una mujer por conocer el nombre de una migrante. 

El estilo de los directores refleja su sello, encontramos de nuevo a una mujer como
protagonista la cual es seguida constantemente por la cámara en planos cerrados, con movimiento provocado por emplear la técnica de cámara en mano y planos secuencia en donde se priorizan los seguimientos a las espaldas de los personajes. La edición le da ritmo al filme y apoya los momentos de suspenso en los que se apoya. 

El guión tiene sus bemoles, por un lado es resaltable la capacidad que tiene de desentramar una serie de sucesos (que da para una historia de casi dos horas) a partir de un hecho "simple": la muerte de una migrante cuyo nombre se desconoce. Desde este punto inicia el viaje de la doctora en busca de conocer su nombre y poco a poco se va enfrentando con algunas hipocresías de parte de otros personajes, en donde el juego principal es la mentira o el ocultar información ya sea para quedar bien ante la sociedad o para agradar a otras personas. Ese guión va proponiendo algunas escenas en donde el ingrediente principal es la sorpresa, contenidas en acciones que el espectador podría no esperar y que sacuden cada vez que aparecen.

Sin embargo, ese mismo guión batalla con dos cosas: el primero, si se ha seguido la carrera de los directores, se encontrará que comienzan a repetir algunas situaciones, especialmente cuando se dan los seguimientos a los personajes, el segundo de ellos es que en aras de justificar todo el camino recorrido por el personaje se van sumando varias situaciones cuyas "coincidencias" llegan a sentirse forzadas.

Este problema se incrementa con la actuación de la protagonista encarnada por Adele Haenel, quien en la mayor parte de la cinta se muestra poco expresiva y a pesar de todo lo que le va sucediendo poca evolución se va reflejando en su personaje. El resto del reparto hace un buen trabajo, proporcionando con ello buenas dosis de verosimilitud a la historia principal.

La chica desconocida es una cinta que tiene como su principal característica el poner en el 
primer plano la situación de los migrantes, quienes comúnmente son ignorados y se ven obligados a desempeñarse como gente que no puede tener acceso a oportunidades y que, como dice el título, es mejor para ellos pasar por desconocidos. Con una historia cuyos elementos se van sintiendo forzados para que la trama siga caminando, podemos decir que no es el mejor de los filmes de los hermanos Dardene, manteniéndose un poco por debajo del nivel al que nos han acostumbrado, es bastante disfrutable si se la ve sin tener grandes expectativas sobre ella.

La chica desconocida, Jean Pierre y Luc Dardene, Bélgica, 2016, 113 min. Con: Adele Haenel, Jeremie Renier, Olivier Bonnaud, et. al.


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