martes, 22 de septiembre de 2015

La historia de un encuentro. La utilidad de un revistero

Por: Manuel Hernández Samperio

Una de mis hipótesis es que el cine, lentamente, regresa a sus inicios, cada vez son más constantes los filmes en donde los movimientos de cámara son nulos o casi nulos, en donde los planos pueden durar largo tiempo e incluso a últimas fechas se ha dado un rescate por la técnica del plano secuencia, llegando a ser muy reconocido como los que hicieron Cuarón e Iñárritu en sus útimas películas donde ganaron el Óscar. 

Y sin embargo, muy pocas veces se ha visto una película con un plano secuencia y un solo movimiento en la cámara, esta es la propuesta de La utilidad de un revistero, película en donde se ilustra un encuentro entre Ana y Miranda, la primera una mujer que se dedica a dar vida a las escenografía teatrales, la otra una joven cuya pasión es dibujar pero que está en busca de un trabajo. 

Planteada como una entrevista en donde Ana evaluará la posibilidad de contratar a Miranda esta cinta recurre en buena medida a recursos teatrales que recuerdan a las primeras cintas de George Melies, en donde se colocaba la cámara en un punto y fijo y toda la acción sucedía frente a ella. Las intervenciones de personas externas (llamadas telefónicas, un repartidor) están muuy bien cuidadas y sincronizadas con la historia, lo cual evidencia que la película fue rodada en una sola toma. 

Acompañada de un guión que si bien en un principio parece avanzar lento, pasando el primer cuarto de la película se torna interesante y cómico gracias a las situaciones que va planteando y a queen buena medida pareciera que se dejó improvisar a las actrices pues los diálogos suenan muy naturales, además de que por momentos pueden llegar a sonar críticos con las nuevas generaciones. 

El diseño de la locación también está bien llevado, pues aunque lo aquejan las goteras y una lluvia repentina, nunca pierde la esencia del personaje que habita ahí logrando que el mismo espectador se sienta parte de la historia. 

Mención aparte merece el diseño sonoro, el cual está muy bien cuidado y en una sala acondicionada es posible percibir cada detalle que se le fue sumando en el proceso de edición, donde se utilizaron varios canales. El final es muy creativo, apoyado en buena medida por la música que se emplea. 

Y por último y como extra cabe mencionar los paralelismos que existen entre una historia que cuentan dentro de la película y lo que ocurre en la historia en sí, para corroborarlo el espectador puede poner atención a los ruidos del tren y al uso de los espejos. 

La utilidad de un revistero se plantea como una propuesta interesante, con una historia común, pero que entretiene y es bastante recomendable.

La utilidad de un revistero de Adriano Salgado, Argentina, 2013, 116 min. Con: Maria Ucedo y Yanina Gruden 


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