Por: Manuel Hernández-Samperio.
Del 16 al 25 de enero se llevará en la Cineteca Nacional la Semana de Cine Portugués. En donde se proyectarán cintas que se han vuelto relevantes en el periodo de los últimos diez años, a pesar de las crisis que ha experimentado el cine procedente de este país.
El ciclo estará conformado por diez películas y comprende una variedad de directores en donde relucen nombres como Pedro Pinho, Rita Azevedo Gomes, Salomé Lamas, o la dupla conformada por Joao Canijo y Anabela Moreira.
La lista de películas es: Portugal, un día cada vez de Joao Canijo y Anabela Moreira; Diario de Beiras de Joao Canijo y Anabela Moreira; La 15a piedra de Rita Azevedo Gomes; El cine, Manoel de Oliveira y yo de Joao Botelho; Joao Benard Da Costa: Los demás amarán las cosas que amé de Manuel Mozos; Río Corgo de Maya Kosa y Sérgio da Costa; El espectador espantado de Edgar Péra; El dorado XXI de Salomé Lamas; Aqui, em Lisboa: Episódios da da vida da cidade de Denis Coté, Dominga Sotomayor, et. al.; La fábrica de nada de Pedro Pinho.
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| Diario de Beiras de Joao Canijo y Anabela Moreira. |
Las funciones se llevarán a cabo en la sala 7 a las 19 hrs. y el sábado con dos funciones a las 17 y 19 hrs. Los boletos ya se encuentran a la venta y pueden conseguirse en las taquillas y también aquí.
A manera de reseña
Portugal, un día a cada vez (Canijo-Moreira, 2015): Es el primero de un díptico dirigido por ambos cineastas, en él se retrata la situación de Trás-os-montes y Alto Douro, un par de regiones en Portugal en donde parece que el tiempo no ha pasado, pues no se ven los avances tecnológicos que el resto del país podría presumir.
Diario de Beiras (Canijo-Moreira, 2017) Complementa el díptico de la pareja de directores, en
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| Río Corgo de Maya Kosa y Sérgio da Costa. |
La 15a piedra (Azevedo Gomes, 2007) en esta cinta vemos una conversación entre Manoel de Oliveira, quien en su momento fue el director más longevo en activo y Joao Benard da Costa, quien en su papel de historiador y gestor cultural llegó a dirigir la Cinemateca Portuguesa. Ambos reflexionan desde sus perspectivas sobre el cine, el arte y la vida.
El cine, Manoel de Oliveira y yo (Botelho, 2016) A partir de una fotografía Botelho comienza a reflexionar sobre el cine que solía hacer Manoel de Oliveira, quien con su estilo marcó las pautas del cine portugués durante muchos años, gracias a que sus cintas tenían la característica de ser atemporales y con grandes tintes de modernidad.
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| El espectador espantado de Edgar Péra. |
Joao Bénard da Costa: los demás amarán las cosas que amé (Mozos, 2014) A lo largo de la cinta conoceremos la figura de Bénard da Costa quien fuera un personaje multifacético no sólo por su
trabajo como director de la Cinemateca Portuguesa, sino por su trabajo como historiador, actor, escritor y sus diferentes gustos como la pintura o las iglesias.
Río Corgo (Kosa y da Costa, 2015) Donde nos presentan a Silva, un vagabundo cuya presencia parece no ser de este mundo, pues en su vida ha sido pastor, barbero, jardinero o mago. En su peregrinar llegará a un pueblo donde conocerá a Ana, una mujer que se adentrará en el universo de Silva, en donde existe más de un ser sobrenatural.
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| El dorado XXI de Salomé Lamas. |
El espectador espantado (Péra, 2016) En este trabajo el director se pone a reflexionar sobre la acción de sentarse en una butaca y ver una película, al hacerlo se va a sumergir hasta los inicios del cine y el proceso de expansión por el que pasó para llegar a la forma en que se exhibe en nuestros
días. En ella se cruza por diferentes géneros y corrientes.
El dorado XXI (Lamas, 2016) Situada en los andes peruanos, en donde existe la mina de La Rinconada, nos muestra diferentes historias de trabajadores que llegan ahí con la esperanza de salir adelante mediante la búsqueda del oro, cada vez más escaso. Trata de hacer un acercamiento a la vida de estos trabajadores tanto en su lugar de trabajo, como en sus vidas cotidianas.
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| La fábrica de nada de Pedro Pinho. |
Aqui, em lisboa: Episódios da vida da cidade (Coté, Sotomayor, et. al.) Fue una cinta que se realizó para celebrar el décimo aniversario del Festival de cine IndieLisboa, en donde se invitó a directores del mundo a filmar una historia que tuviera como protagonista a la ciudad de Lisboa y en donde se ven reflejados diferentes actores, lugares, actividades, etc.
La fábrica de nada (Pinho, 2017) Es la historia de un grupo de trabajadores que descubre que la
administración de la fábrica donde laboran está robando sus propios materiales. Mientras el despido masivo se avecina son obligados a parar su producción, lo cual desatará una revuelta con consecuencias no sólo en ellos, sino en el entorno próximo.
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